· La duranguesa Irati Rey Hernández es la regenta de Artistinta

Una chica «Curvy» es una actitud. Mucha gente está equivocada con el término y cree que significa ser una chica XL, pero va mucho más lejos que eso. Ser Curvy es quererse a sí misma; es aceptar tu cuerpo en cualquier etapa de tu vida independientemente de tu peso, estatura o talla. Tiene como misión celebrar todos los cuerpos femeninos fomentando la confianza en una misma. Porque un número no puede determinar si eres o no feliz, estilosa o sexy.

Estamos en contra de los canones de belleza que están tan en pie de guerra y nos muestran hoy a mujeres como perchas, de excesiva delgadez, y que no se corresponden en absoluto con las múltiples bellezas que la realidad dibuja día a día. Una mujer con curvas está representada en esa diversidad necesaria. Afortunadamente, la revolución de las curvas se va abriendo paso en más firmas, y en la publicidad.

Artistinta ha sido patrocinador de Miss Euskadi Plus Size 2018 y, personalmente, he vivido la gratificante experiencia de participar como jurado de casting junto a la maravillosa Janire Azkueta, la actual ganadora.

Un certamen de belleza con reconocimiento internacional donde participan chicas a quienes les apasiona la moda y quieren formar parte de ella.

Como mujer y curvy, creo en el empoderamiento femenino y en la diversidad trabajando con marcas con la misma filosofía que vistan a mujeres y no a estereotipos, valiéndose de ropa que no está diseñada para cubrirse, sino para sacarse partido tengas una talla 38 como una 68 porque toda mujer tiene derecho a poder seguir las tendencias de moda y sentirse guapa.

Al final, las mujeres sometidas a la dictadura del tallaje estándar durante décadas hoy pueden encontrar más firmas que las hagan sentirse cómodas, bellas y actuales. Al fin y al cabo, también representaron tiempo atrás el canon de belleza imperante. Las modas van y vienen, pero la diversidad es una constante y quienes nos dedicamos a la moda estamos para satisfacer sus necesidades, no para dictarlas.

Aún así todavía queda mucho trabajo social por delante.

Somos fuertes, somos reales y, sobre todo, somos mujeres.